René Vega Giles
Desde que asumió la presidencia municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo dejó una deuda millonaria al ayuntamiento, no sólo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sino también con empresas constructoras, que en total fueron por más de 200 millones de pesos.
Estas mismas fueron, en parte, omitidas por la administración local de Francisco Antonio Villalobos Adán, quien incluso trató de buscar el amparo de la Justicia Federal sin éxito.
Con la Comisión Federal de Electricidad, el hoy diputado federal Cuauhtémoc Blanco Bravo, creció la deuda con la CFE de 15 millones de pesos a cerca de 80 millones de pesos, sin contar las multas (nunca pagadas por quien continuó el cargo) de 25 millones de pesos al conectar los pozos abastecedores del agua con “diablitos”.
Antes de asumir el gobierno del estado, Cuauhtémoc Blanco Bravo contrató la empresa Monterrey Asfaltos y Pavimentos S.A. de C.V., en la que los hermanos Julio César y Roberto Carlos Yáñez Moreno, habían sostenido pláticas para realizar diversas obras en Cuernavaca, que presumieron “fueron donadas”.
Los hermanos Yáñez Moreno, quienes pagaron un contrato por siete millones de pesos para que Cuauhtémoc Blanco Bravo fuera el candidato del Partido Social Demócrata (PSD) a la presidencia municipal de Cuernavaca (en el año 2018) pretendían cobrar un 30 por ciento de los 35 millones 978 mil pesos en el pago de los trabajos realizados.
Sin embargo, al dejar de finiquitarse el adeudo por los intereses moratorios, actualmente el ayuntamiento de Cuernavaca deberá otorgar 93 millones de pesos a la empresa antes referida, con base a una denuncia penal realizada contra la Comuna citadina.
Ante lo anterior, el departamento jurídico del ayuntamiento de Cuernavaca, inició las negociaciones y finiquitar el adeudo, bajo la condición de iniciar el proceso penal correspondiente contra Cuauhtémoc Blanco Bravo.